Por Lola García Publicado 13th junio 2019 En Entrevistas 2
"El agricultor ha sido ingnorado durante mucho tiempo pero hay que tratarlo bien"
Trabajador infatigable, Ramón Camarasa sentía que tenía que salir de Baldellou para que su empresa prosperase. No le fallaba el amor a su pueblo, pero su situación geográfica y la deficiente carretera constituían un lastre para su negocio. “Nosotros movemos volumen y a los camiones no les gustaba trasladarse hasta Baldellou porque queda apartado y la carretera es regular. Las comunicaciones nos mataban. Necesitábamos espacio y situarnos cerca de las principales vías de comunicación”. No se fueron muy lejos, encontraron un lugar a pie de la N-123, en el término municipal de Estopiñán del Castillo y “si ahora lo hiciera-medita- me iría más al sur, más cerca del regadío”. Porque él, sobre todo, se dedica a la semilla de cebada maltera y la producción y la riqueza se sitúa en los regadíos de la zona sur de La Litera y Los Monegros. Semillas Camarasa, en su nueva ubicación, ha visto crecer su plantilla de trabajadores y la producción. En sus instalaciones de Baldellou llegaron a mover 2 millones de kilos como máximo de semillas y ahora, 9 millones.
“Hemos realizado tres fases de ampliación, en cuanto se podía, invertíamos de nuevo en otra fase”. En esta etapa intensa, Ramón Camarasa ha contado con el apoyo del Programa de Desarrollo Rural de Aragón. “¿Quién te da el 18% de una inversión? Eso nos ha permitido respirar e invertir más. La adquisición de la seleccionadora de semillas también entró en el PDR por innovadora. Dan, pero te exigen”. Semillas Camarasa hizo su gran cambio hace 12 años “era el momento, la decisión estaba tomada”. Se dedica a la venta de semillas y además a la compra del cereal. Sobre todo, su punto fuerte radica en la semilla maltera certificada y trabaja, desde hace muchos años, con la empresa Damn de Lérida. “Una relación larga basada en no hacerse faenas. Estamos luchando para que el cultivo de cebada maltera crezca en la provincia”. Una cebada de ciclo corto que también permite el ciclo corto de maíz. De hecho, un par de días después de mi visita Camarasa había organizado una jornada de agricultores y cervezas Damn para que los productores conocieran los nuevos campos de ensayo y el cereal. “Durante muchos años los agricultores han sido ninguneados e ignorados y eso debe cambiar. Hay que atenderlos bien porque la base de todo radica en la buena materia prima”.
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